El hombre que pudo haber hecho cambiar la historia de España y del mundo
Tal día como hoy, pero en 1588 murió en Lisboa D. Álvaro de Bazán y Guzmán. He de reconocer que yo no había oído hablar de este hombre nunca, y si lo hice pasó fugazmente por mi atención y memoria de manera que ahora no recordaba nada. Fue en mi viaje por la ruta del Quijote, estando visitando el pueblo del Viso del Marqués (Ciudad Real), cuando conocí a Don Álvaro y su palacio, y despertó en mí una gran curiosidad la historia de este gran e ilustre personaje. Me planteaba, ante todo, que posiblemente Europa y el mundo sería de otra forma si este invencible marino militar no hubiese muerto en los albores de la batalla de la Armada Invencible.
Me llamaba mucho la atención el hecho de que este gran almirante, descendiente de ilustres marinos militares al servicio de la corona, habiendo nacido en Granada, donde se encontraba destinado su padre, quien ese mismo año tomó posesión como Capitán General de las Galeras de España, no se supiera más de él ni se le diera la relevancia e importancia que a mi entender deberían dársele a nivel nacional y, sobre todo, a nivel granadino. Nació en la casa cuyo solar ocupa hoy el banco BBVA, esquina Reyes Católicos con Plaza Isabel la Católica. En esta su ciudad natal hay una pequeña calle con su nombre, perpendicular con Gran Vía, esquina al edificio de la Tesorería de la Seguridad Social, y una placa con un relieve de su busto en la esquina del edificio citado del BBVA.
A LA MEMORIA DEL ILUSTRE GRANADINO D. ÁLVARO DE BAZÁN. MARQUES DE SANTA CRUZ DEL VISO. GENERAL DE LA ARMADA. VENCEDOR EN LEPANTO, TÚNEZ. LAS ISLAS TERCERAS Y ALTA MAR. NACIDO EN LA CASA SEÑORIAL QUE OCUPABA EL SOLAR DE ESTAS, EL 12 DE DICIEMBRE DE 1526 FALLECIÓ EN LISBOA EL 9 DE FEBRERO DE 1588.
XXXI – X – MCMXXIII – EL AYUNTAMIENTO LA REPUSO EN EL IV CENTENARIO 1888
Pero ¿quién fue realmente este hombre? Fue un militar y almirante español del siglo XVI célebre por el uso de galeones de guerra y por utilizar por primera vez la infantería de marina para realizar operaciones anfibias.
Ya con nueve años corría por la cubierta de la nave capitana de su padre iniciando así su aprendizaje náutico. Participó con 18 años junto a su padre en la batalla de Muros (1544) en la costa gallega, que terminó con una rotunda victoria española causante de 3000 bajas francesas.
En 1554 fue nombrado capitán general de la Armada con solo 28 años.
Álvaro de Bazán y Guzmán fue el hombre clave en la victoria de Lepanto en 1571.
En diciembre de 1576 fue nombrado Capitán General de las Galeras de España.
Cuando Felipe II optó a la corona de Portugal, por herencia de su madre Isabel de Portugal, se opusieron a este objetivo Don Antonio I, Prior de Crato, quien creía ser el heredero al ser también nieto del rey portugués Don Sebastián. También se opusieron las reinas Catalina de Médicis, regente de Enrique III de Francia, e Isabel I de Inglaterra, por considerar excesivo el poder acumulado por el monarca español. En este conflicto tuvo Don Álvaro otra intervención destacada, tanto en el continente como en la isla Terceira del archipiélago de las Azores, posibilitando la entrada triunfante del monarca español en Lisboa como rey de Portugal en 1580.
Todavía se encontraba Don Álvaro de Bazán y Guzmán en las Azores cuando envió al rey Felipe II su primera propuesta de ataque a Inglaterra, ante la hostilidad de la reina inglesa.
La lucha contra el protestantismo, el control de las rutas americanas y acabar de una vez por todas con la piratería que la reina de Inglaterra fomentaba en el Atlántico para hundir o robar a los barcos españoles, fueron los motivos por los que el 26 de enero de 1586 Felipe II ordenó a Álvaro de Bazán preparar una potente armada en Lisboa, a la que posteriormente los ingleses llamarían con sorna “La Invencible”. Y a la formación de este gran proyecto se dedicaría Don Álvaro hasta su prematura muerte, producida el día 9 de febrero de 1588, pasando a la historia como uno de los mayores genios militares.
Con la muerte de don Álvaro de Bazán y Guzmán, el proyecto de la Armada queda huérfano en el liderazgo hasta que Felipe II coloca al frente a don Alonso Pérez de Guzmán, VII duque de Medinasidonia.
Y aquí me surge la gran pregunta, ¿hubiera conseguido Don Álvaro de Bazán y Guzmán la victoria contra la flota inglesa y la invasión y control de Inglaterra? Don Álvaro no perdió nunca una batalla; durante toda su vida militar permaneció invicto. Posiblemente, el mundo sería hoy distinto, mejor o peor, pero diferente, si el gran almirante hubiese dirigido la contienda.
Por sus méritos y los servicios prestados a España y la corona, Felipe II le concedió el título de nobleza de marqués de Santa Cruz de Mudela, por ser señor de la villa de Santa Cruz de Mudela, con lo que el Viso del Puerto pasó a llamarse Viso del Marqués.
A fines del siglo XVI, el marqués construyó dos palacios, uno en la plaza mayor de Valdepeñas, que no se conserva, y otro al lado de la iglesia parroquial de El Viso del Marqués. Este palacio del Viso del Marqués, considerado una joya del Renacimiento español, es utilizado actualmente como Archivo General de la Marina Álvaro de Bazán. Cuando estuve visitándolo parecía como si estuviera en uno de los palacios de las familias pudientes del renacimiento florentino. Y a la lógica pregunta de por qué el Marqués construyó esta extraordinaria obra en un pueblecito como el Viso, cualquier lugareño responderá orgulloso “porque pudo y porque quiso”.
Hoy se cumplen 430 años de la muerte de este insigne marino de guerra granadino, que pudo haber hecho cambiar la historia de España y del mundo.
Chove 9 de febrero de 2018